El
La visita de Paula a la empresa en pocas palabras, te había
alegrado el día. Venias completamente ofuscado y cansado, por no decir
“podrido”, pero verla tan hermosa como
era ella, te había sacado la más grande de las sonrisas.
Terminaste tu jornada laboral, mejor de lo que habías
esperado. Y solo esperabas que este dia no acabara nunca, o bueno, mejor dicho,
que la noche no acabara nunca, porque tenias el fuerte presentimiento de que la
noche prometía….y mucho. Te sentías una
mujer, en el sentido en que no lograbas comprender de que venían todas estas
cataratas de emociones que te provocaba ver a Paula, claramente no era normal
en vos, y es que ni siquiera reconocías de que se trataban ni tampoco tenías un
punto de comparación con algo similar que hubieras vivido… solo Paula lograba
hacer que te sintieras asi.
Días atrás, estabas completamente negado a tratarla de
nuevo, a buscarla…a pedirle una respuesta. Y hoy, su presencia te saco de tu
eje, no es que estuvieras en uno ¿no?, pero habías tomado una decisión, decisión que perdió importancia y seriedad
cuando tus ojos se cruzaron con los de ella, esos hermosos ojos verdes que te
hacían volar y confundir a la vez.
Abriste la puerta de tu casa y caminaste hasta el sillón del
living donde dejaste tus cosas de la oficina, agarraste tu celular para
verificar si no había ninguna señal de que Paula vendría esta noche…suspiraste.
Podría venir tanto como no…y demás estaba decir que la respuesta negativa te
arruinaría.
En silencio y con paciencia, te dirigiste al baño para darte
una ducha…tendrías que ser positivo si no querías que la desilusión te agarrara
desapercibido, sabias perfectamente…que podría existir esa posibilidad, y ni
siquiera querías pensarlo. Te bañaste pensando en su sonrisa, en lo mucho que
la consentirías…en lo mucho que la harías reír, porque eso era lo que más te
gustaba de ella, su risa, su alegría…la misma que tenía cuando conociste a “Agustina”, sonreíste cuando
recordaste aquel episodio. Y una vez más pensaste…¿Por qué estabas recordando
esas cosas? ¿Por qué de repente comenzaste a sentir este tipo de
cosas?....obviamente que pensar en ella siempre te sacaba una sonrisa,
pero…¿Qué significaría eso?, ¿y si estabas comenzando a quererla?...¿y si ya la
querias y no podias admitirlo?, el sonido de tu celular te saco de tus
pensamientos, y casi que saliste corriendo del baño para lograr atender la
llamada, y si que lo lograste…pero cuando te diste cuenta que no era Paula,
quisiste cortar, pero era tu hermano, Federico.
-Fede…¿Cómo va?—preguntaste, mientras enrollabas la toalla a
tu cintura—
-Pedrito…todo bien, ¿vos? ¿tus chicas?—dijo el, y en un
primer momento te pusiste tenso, pero luego intentaste relajarte, porque el no
sabia nada—
-Bien…ahí andan—dijiste riendo—¿Qué paso?—preguntaste,
mientras caminabas hacia el ropero
para poder cambiarte—
-Nada…llamaba para preguntarte si querés venir a cenar con
Rocio, Luciana y conmigo por supuesto—dijo el, Rocio era su novia—
-¿Hoy?—preguntaste—
-No Pepe…la semana que viene, ¿Para que voy a llamarte con
antelación imbécil?—dijo haciéndote reir, tenia razon, pero, ¿Quién sabe?—
-Hoy no puedo—dijiste, y lo escuchaste reir—
-Mmmm…no me digas, no insisto mas, ¿Qué onda? ¿Cómo se
llama?—pregunto, y pensaste que quizás el podría aclararte algunas dudas, su
relacion con Rocio llevaba mas de un año y estaban perfectos, los veias
felices—
-¿Rocio esta ahí?—preguntaste, no querias que escuchara—
-No, entro a bañarse, y sabes como son las mujeres—dijo el,
haciéndote sonreir—
-Se llama Paula…y no se que onda, no se que me pasa—dijiste,
mientras dabas unos pasos hacia atrás y te sentabas en la cama—
-¿Cómo que no sabes que te pasa?—pregunto—
-Eso…no se, la cosa es medio complicada, pero, siempre tengo
ganas de verla—dijiste y lo escuchaste reir—¿de que te reis?—preguntaste
molesto—
-de que te gusta la chica…¿no era mas fácil decir
eso?—pregunto—
-Obvio que me gusta… pero, es como que…todo el tiempo la
tengo presente—dijiste y Federico volvió a reir—
-¿La pensas a cada rato decis?...bueno, estas hasta las
bolas—dijo el, y tu corazon comenzo a martillar, ¿Qué queria decir con eso?—
-¿Qué?—dijiste—
-que estas enganchado Pedro…estas enganchado con Paula—dijo
el, y en ese momento se escucho la voz de Rocio que llamaba a tu hermano—
-Pollerudo…anda que te llaman—dijiste riendo—
-No digas mucho…que ya te voy a ver igual—dijo el, y despues de despedirse, corto la llamada—
Suspiraste…entonces, ¿estabas enamorado de Paula?, te
preguntaste, y te respondiste al mismo tiempo, con que hoy lo descubrirías. Hoy
descubrirías si querias a Paula.
Sonreíste y te cambiaste rápidamente, para ponerte manos a
la obra…primeramente, ibas a preparar algo para cenar. No tenías ni la más
pálida idea de que hacer, pero…algo te iba a salir. Lo único que esperabas era
que ese algo saliera bien. Terminaste haciendo fideos espaguetis, con una salsa
que habías aprendido de tu mama. Miraste el reloj mientras los fideos se
cocinaban, estaban a punto de ser las 22:30, bien…si llegaba en un rato, iba a
comer los fideos calientes.
Una vez que todo estuvo listo, te encargaste de poner la
mesa y algunas flores como centro de mesa, que habías sacado de las masetas del
balcón. Solo quedaba esperar a que Paula llegara, y ojala fuera pronto, las
ganas de verla se acrecentaban a cada minuto, y mas aun, las ganas por
descubrir…que cosas te pasaban con ella.
Te sentaste en el sillón del living, poniendo tus pies
encima de la mesa y obviamente con el celular en tus manos. A cada segundo
intentabas mirar su ultima conexión en Whatsapp, pero la mujer que no dejaba a
tus pensamientos en paz, la habia sacado para sus contactos…en ningún momento
la viste en línea y pensaste que quizás estaría durmiendo.
Miraste la hora…eran las 23:55, la cena ya estaba fría, pero
no importaba, iban a ser las doce. Ella no iba a venir, sonreíste con ironia,
¿Qué te hacia pensar que lo haría? ¿Qué sentía las mismas cosas que vos?...Ja
ja…eras un tonto Pedro.
Escuchaste que tocaron la puerta…y tu corazon latio
fuertemente, ¿seria ella?, automáticamente te pusiste de pie, y cuando abriste
la puerta…Una sonrisa apareció en tu rostro, era ella…Paula habia venido.
Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Treinta y seis, que espero les guste y mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido.
me gustaría saber si les gusta y leerlas.
Si hay MUCHOS, MUCHOS, MUCHOS comentarios, mañana tienen otro...pero solo si hay MUCHOS, y (con muchos me refiero a mas de 10). Y CON NOMBRE DE TWITTER.
Comenten, comenten, comenten♥
ayyy me muero,hermoso el cap que se viene y este muy lindo rociibell23
ResponderEliminarAhhhhhh, no nos podés dejar ahí Belu!!!! Ya quiero leer el siguiente jajaja
ResponderEliminarahh me muero espero el siguiente besos
ResponderEliminarNaaaaa no lo podes cortar ahiiiii!!! Mucha maldad jajaja mimiroxb
ResponderEliminarbellísimo como siempre
ResponderEliminar@pedropaulaoli4
Ahhhh noooo pensé q no venía! necesito maaaaaas! Jaja espero el próx ansiosa, bsoos @GraciasxTodoPYP
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