jueves, 8 de octubre de 2015

Capitulo 36




El




La visita de Paula a la empresa en pocas palabras, te había alegrado el día. Venias completamente ofuscado y cansado, por no decir “podrido”, pero  verla tan hermosa como era ella, te había sacado la más grande de las sonrisas.

Terminaste tu jornada laboral, mejor de lo que habías esperado. Y solo esperabas que este dia no acabara nunca, o bueno, mejor dicho, que la noche no acabara nunca, porque tenias el fuerte presentimiento de que la noche prometía….y mucho.  Te sentías una mujer, en el sentido en que no lograbas comprender de que venían todas estas cataratas de emociones que te provocaba ver a Paula, claramente no era normal en vos, y es que ni siquiera reconocías de que se trataban ni tampoco tenías un punto de comparación con algo similar que hubieras vivido… solo Paula lograba hacer que te sintieras asi.

Días atrás, estabas completamente negado a tratarla de nuevo, a buscarla…a pedirle una respuesta. Y hoy, su presencia te saco de tu eje, no es que estuvieras en uno ¿no?, pero habías tomado una decisión,  decisión que perdió importancia y seriedad cuando tus ojos se cruzaron con los de ella, esos hermosos ojos verdes que te hacían volar y confundir a la vez.

Abriste la puerta de tu casa y caminaste hasta el sillón del living donde dejaste tus cosas de la oficina, agarraste tu celular para verificar si no había ninguna señal de que Paula vendría esta noche…suspiraste. Podría venir tanto como no…y demás estaba decir que la respuesta negativa te arruinaría.

En silencio y con paciencia, te dirigiste al baño para darte una ducha…tendrías que ser positivo si no querías que la desilusión te agarrara desapercibido, sabias perfectamente…que podría existir esa posibilidad, y ni siquiera querías pensarlo. Te bañaste pensando en su sonrisa, en lo mucho que la consentirías…en lo mucho que la harías reír, porque eso era lo que más te gustaba de ella, su risa, su alegría…la misma que tenía cuando  conociste a “Agustina”, sonreíste cuando recordaste aquel episodio. Y una vez más pensaste…¿Por qué estabas recordando esas cosas? ¿Por qué de repente comenzaste a sentir este tipo de cosas?....obviamente que pensar en ella siempre te sacaba una sonrisa, pero…¿Qué significaría eso?, ¿y si estabas comenzando a quererla?...¿y si ya la querias y no podias admitirlo?, el sonido de tu celular te saco de tus pensamientos, y casi que saliste corriendo del baño para lograr atender la llamada, y si que lo lograste…pero cuando te diste cuenta que no era Paula, quisiste cortar, pero era tu hermano, Federico.







-Fede…¿Cómo va?—preguntaste, mientras enrollabas la toalla a tu cintura—

-Pedrito…todo bien, ¿vos? ¿tus chicas?—dijo el, y en un primer momento te pusiste tenso, pero luego intentaste relajarte, porque el no sabia nada—

-Bien…ahí andan—dijiste riendo—¿Qué paso?—preguntaste, mientras caminabas hacia el ropero 
para poder cambiarte—

-Nada…llamaba para preguntarte si querés venir a cenar con Rocio, Luciana y conmigo por supuesto—dijo el, Rocio era su novia—

-¿Hoy?—preguntaste—

-No Pepe…la semana que viene, ¿Para que voy a llamarte con antelación imbécil?—dijo haciéndote reir, tenia razon, pero, ¿Quién sabe?—

-Hoy no puedo—dijiste, y lo escuchaste reir—

-Mmmm…no me digas, no insisto mas, ¿Qué onda? ¿Cómo se llama?—pregunto, y pensaste que quizás el podría aclararte algunas dudas, su relacion con Rocio llevaba mas de un año y estaban perfectos, los veias felices—

-¿Rocio esta ahí?—preguntaste, no querias que escuchara—

-No, entro a bañarse, y sabes como son las mujeres—dijo el, haciéndote sonreir—

-Se llama Paula…y no se que onda, no se que me pasa—dijiste, mientras dabas unos pasos hacia atrás y te sentabas en la cama—

-¿Cómo que no sabes que te pasa?—pregunto—

-Eso…no se, la cosa es medio complicada, pero, siempre tengo ganas de verla—dijiste y lo escuchaste reir—¿de que te reis?—preguntaste molesto—

-de que te gusta la chica…¿no era mas fácil decir eso?—pregunto—

-Obvio que me gusta… pero, es como que…todo el tiempo la tengo presente—dijiste y Federico volvió a reir—

-¿La pensas a cada rato decis?...bueno, estas hasta las bolas—dijo el, y tu corazon comenzo a martillar, ¿Qué queria decir con eso?—

-¿Qué?—dijiste—

-que estas enganchado Pedro…estas enganchado con Paula—dijo el, y en ese momento se escucho la voz de Rocio que llamaba a tu hermano—

-Pollerudo…anda que te llaman—dijiste riendo—

-No digas mucho…que ya te voy a ver igual—dijo el, y  despues de despedirse, corto la llamada—







Suspiraste…entonces, ¿estabas enamorado de Paula?, te preguntaste, y te respondiste al mismo tiempo, con que hoy lo descubrirías. Hoy descubrirías si querias a Paula.

Sonreíste y te cambiaste rápidamente, para ponerte manos a la obra…primeramente, ibas a preparar algo para cenar. No tenías ni la más pálida idea de que hacer, pero…algo te iba a salir. Lo único que esperabas era que ese algo saliera bien. Terminaste haciendo fideos espaguetis, con una salsa que habías aprendido de tu mama. Miraste el reloj mientras los fideos se cocinaban, estaban a punto de ser las 22:30, bien…si llegaba en un rato, iba a comer los fideos calientes.

Una vez que todo estuvo listo, te encargaste de poner la mesa y algunas flores como centro de mesa, que habías sacado de las masetas del balcón. Solo quedaba esperar a que Paula llegara, y ojala fuera pronto, las ganas de verla se acrecentaban a cada minuto, y mas aun, las ganas por descubrir…que cosas te pasaban con ella.

Te sentaste en el sillón del living, poniendo tus pies encima de la mesa y obviamente con el celular en tus manos. A cada segundo intentabas mirar su ultima conexión en Whatsapp, pero la mujer que no dejaba a tus pensamientos en paz, la habia sacado para sus contactos…en ningún momento la viste en línea y pensaste que quizás estaría durmiendo.

Miraste la hora…eran las 23:55, la cena ya estaba fría, pero no importaba, iban a ser las doce. Ella no iba a venir, sonreíste con ironia, ¿Qué te hacia pensar que lo haría? ¿Qué sentía las mismas cosas que vos?...Ja ja…eras un tonto Pedro.

Escuchaste que tocaron la puerta…y tu corazon latio fuertemente, ¿seria ella?, automáticamente te pusiste de pie, y cuando abriste la puerta…Una sonrisa apareció en tu rostro, era ella…Paula habia venido.





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Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Treinta y seis, que espero les guste y  mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido. 

 me gustaría saber si les gusta y leerlas.



Si hay MUCHOS, MUCHOS, MUCHOS comentarios, mañana tienen otro...pero solo si hay MUCHOS, y (con muchos  me refiero a mas de 10). Y CON NOMBRE DE  TWITTER.  


Comenten, comenten, comenten♥




6 comentarios:

  1. ayyy me muero,hermoso el cap que se viene y este muy lindo rociibell23

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  2. Ahhhhhh, no nos podés dejar ahí Belu!!!! Ya quiero leer el siguiente jajaja

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  3. ahh me muero espero el siguiente besos

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  4. Naaaaa no lo podes cortar ahiiiii!!! Mucha maldad jajaja mimiroxb

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  5. bellísimo como siempre
    @pedropaulaoli4

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  6. Ahhhh noooo pensé q no venía! necesito maaaaaas! Jaja espero el próx ansiosa, bsoos @GraciasxTodoPYP

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