Capitulo 78

Ella

Este era un nuevo comienzo, estabas completamente segura…sentias que algo habia cambiado en vos, y sin dudas, sabias de que se trataba. Venias con mas valor, mas coraje para enfrentar lo que se venia.

Pedro no habia querido dejarte ir, pero despues de mucha insistencia por tu parte, terminaron yendo los dos para tu casa y el nuevamente cocinando para vos…estabas acostumbrándote a sus mimos otra vez, y no sabias que tan malo era eso.

-¿estas bien?—pregunto el, vos lo miraste frunciendo el ceño—

-si…¿Por qué?—preguntaste—

-estas muy palida—dijo el, y le sonreíste para luego tirarle un beso—

-mejor que nunca—dijiste y el sonrio e hizo lo mismo que vos pero con su mano. Vos te acercaste y 

lo abrazaste por la espalda—¿Qué me vas a cocinar?—preguntaste, apoyando tu mejilla en su hombro—

-Y no se…asado Paula—dijo el, y lo golpeaste—

-¡hey no seas asi!—dijiste riendo—

-y si mi amor, terribles ñoquis—dijo el y vos lo miraste mal, se dio la vuelta y beso tu mejilla—loquita—

-maldito—dijiste haciendo un puchero…el mordio tu mejilla—¡Ay!...deja de hacerme bullying—dijiste sobándote la mejilla, el dejo un beso allí—me voy—dijiste, haciéndote la enojada y dándote la vuelta—

-¡hey!—dijo el, tomandote por la muñeca—¿te lastime?—pregunto, mirándote la mejilla con gesto de preocupación—

-si—dijiste, mirando hacia otro lado—

-mi amor…¿de verdad?—pregunto—

-si te dije—dijiste, y el volvió a mirarte la mejilla, para luego acariciártela—

-perdon…no quise morderte fuerte—dijo el, mirándote. Vos comenzaste a reir, y el te miro—

-tonto…no paso nada—dijiste, y el sonrio—

-deja de preocuparme al pedo loca—dijo el besando tu frente—voy a seguir cocinando…déjame en paz, chau—dijo el y vos reíste para luego besar su mejilla y dejarlo en paz—

Lo dejaste terminar con la cena, y fuiste hasta la habitación para dejar tus cosas y el bolsito que Pedro había traido preparado. Una vez adentro, te encargaste de dejar la ropa de Pepe doblada en uno de los cajones que habias apartado para el antes de que todo lo de Virginia pasara, una vez que lo hiciste, agarraste nuevamente el bolso para guardarolo, pero antes, un ruido dentro de este te llamo la atención, y cuando miraste que habia adentro, tu corazon casi explota de amor…habia un librito dentro de su envoltorio aun, y cuando miraste la imagen de la tapa pudiste ver de que se trataba…las etapas del embarazo, sonreíste a mas no poder para luego, con el libro entre tus manos, ir hacia la cocina y abrazarlo por la espalda, casi asustándolo…

-¿Tenemos hambre?—dijo el, y golpeaste su espalda—

-deja de bardearme o te echo de mi casa—dijiste haciéndolo reir—

-vos me echas y yo me llevo los ñoquis—dijo el dándose la vuelta, y rápidamente escondiste el libro detrás de tu espalda. El te miro con una sonrisa picara—¿Qué tenes ahí atrás?—pregunto, intentando ver por encima de tus hombros—

-¿Qué tenias en el bolso?—preguntaste y el fruncio el ceño—

-que se yo…¿mi ropa?—pregunto y vos sonreíste para luego besar su mejilla—

-mentiroso—dijiste y el sonrio—

-Ya me devolves el libro—dijo el y vos comenzaste a reir para luego sacarlo de detrás de tu espalda—

-¿Cuándo lo compraste loquito?—preguntaste mirando la tapa una vez mas, el sonrio—

-el mismo dia que me entere…estaba loco, pero estaba tan ansioso por ir a la consulta que ni siquiera queria abrirlo—dijo el, encogiéndose de hombros, vos lo besaste—

-¿lo leemos juntos?—preguntaste, el beso tu frente—

-ni loco…comprate el tuyo, te digo a donde lo consegui si queres—dijo el, y lo miraste enojada—

-¿Qué tenes conmigo hoy?...acordate que tengo a tu hijo adentro mio—dijiste y el te tomo por las mejillas para luego besarte—

-¿y?...para mi, esa es una razon mas para amarte, ¿sabes?...el saber que tenes algo mio ahí adentro es lo mas hermoso del mundo—dijo el, y sentiste como tus ojos se humedecían—¡hey!...esta vez no te bardee—dijo el haciéndote reir, mientras te rodeaba fuertemente con sus brazos—te amo loquita hermosa…te amo, te amo, te amo—dijo—

-yo tambien mi amor—dijiste abrazandolo y dejando tu cabeza sobre su pecho—¿ya esta la comida?—preguntaste haciéndolo reir—

-que poco te dura el amor…¿a quien dijiste que amabas? ¿a los ñoquis o a mi?...capaz me comi el viaje viste—dijo el, haciéndote reir una vez mas—

-¡cortala!—dijiste golpeando su pecho—

Pedro volvió a besarte…¡uy! ¡Estabas loca! ¡loca de amor!...Vos te encargaste de poner la mesa, y a los pocos minutos se sentaron a comer.

Y cuando creiste que ibas por fin a probar bocado…tu celular comenzo a sonar, de mas estaba decir que casi lloraste de la bronca, esto no podia estar pasando…¡y con el hambre que tenias!, Pedro te miraba riendo como si estuvieran haciendole cosquillas, ni siquiera perdiste tiempo y le hiciste un simple “fuck you”, para luego agarrar tu teléfono y atender.

-¡Hola!—dijiste, con la voz llena de bronca…digna de una gordita con un jaguar adentro que rugia por un poco de comida—

-epaaaa…¿Qué paso que estamos de mal humor?—preguntaron del otro lado, y te arrepentiste al 

instante de no haber mirado la pantalla antes de atender…era Virginia—

-Virgi…no, pasa que estaba comiendo—dijiste tratando de reir, obviamente una risa mas falsa que moneda de tres pesos, pero…necesitabas caretear el momento—

-ah…ya entendí gordita—dijo riendo del otro lado—¿hay suficiente comida para mi?, porque estoy llegando a tu casa mamerta—dijo y sentiste como un nudo se formaba en tu estomago…de repente, el hambre se habia ido como por arte de magia—

-¿estas llegando?—preguntaste, como si de una sorda se tratara—

-si boluda…¿no escuchas?—dijo riendo—¡llegue! ¡abrime que subo!—dijo, y en ese preciso momento, escuchaste el timbre del portero electrónico. Tus ojos se clavaron en los de Pedro y el tambien dejo de comer para mirarte con cara de asustado—

¿y ahora?....otra vez se repetia la misma historia….¿algo mas?

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Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Setenta y ocho que espero les guste y  mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido. 

 me gustaría saber si les gusta y leerlas.

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Capitulo 77

El

La mirabas y no podías creer que la tuvieras en tus brazos, sin mencionar las enormes ganas de reír que tenías, al verla cabecear y cerrar sus ojos mientras veían la televisión.  Besaste su frente muy sentidamente, y te moviste un poco, la llevarías hasta la cama, así podría descansar tranquila, y vos podrías empezar a preparar el almuerzo.

La dejaste sobre la cama, y le sacaste las zapatillas para que pudiera dormir comoda un rato, ella se acomodo y sin darse cuenta que la habias cambiado de lugar, volvió a caer en un sueño profundo…bah, uno del que ni siquiera habia salido. Saliste del cuarto lo mas suavemente posible y sin hacer ruido, y te dirigiste a la cocina para ver que podias hacer…y bueno, te encontraste con la heladera vacia. No creías que Pau fuera a despertar por un buen rato, asi que decidiste salir a comprar lo necesario.

Mientras caminabas, escuchaste tu celular sonar…era tu mama. Sonreíste.

-Buenas—dijiste, en un cantito mientras sonreías—

-Epa…¿nos levantamos optimistas hoy? ¿Qué paso que se te escucha contento?—pregunto tu mama, y quisiste reir, ¡si se enterara que iba a ser abuela, moriría en el acto!—

-Nada… me levante de buen humor nada mas—dijiste—

-Ajam…¿Por qué no fuiste a trabajar hoy?—pregunto, y puteaste a tu papa mentalmente—

-Tenia que hacer unos tramites—dijiste, intentando restarle importancia y tratar de transmitirle lo mismo  a tu mama—

-Claro…¿venis a almorzar hoy?—pregunto, y sonreíste—

-No—dijiste—

-¿Por qué?—pregunto entre sorprendida e indignada. Las ultimas semanas habias ido a almorzar con ella—

-porque no puedo—dijiste mientras entrabas al supermercado—

-Pedro Alfonso…quiero saber ahora mismo lo que me estas ocultando—dijo ella—

-Mama…ahora no puedo hablar, estoy entrando al supermercado a comprar mi almuerzo…te llamo mas tarde, ¿si?, te amo, chau—dijiste, y ni siquiera esperaste a que te respondiera, cortaste automáticamente mientras reías…ibas a tener una catarata de mensajes luego de esto—

Una vez que agarraste un carrito, decidiste que tendrías que reabastecer tu heladera y tu alacena, por el bien tuyo y el de Paula…y ahora el de tu bebe. Compraste miles de las galletitas que Paula amaba, y también otras de sus tentaciones. Luego pasaste a pensar en el almuerzo de hoy, y en el de los próximos días…Sonreíste, ni siquiera sabias si comerías en tu casa o en la de Pau, pero por las dudas.

Cuando terminaste de pagar todo, volviste a casa con miles de bolsas en las manos, hace tanto no ibas de compras que habías perdido la costumbre. Dejaste las cosas sobre la mesa y te dirigiste a la habitación, tu bella durmiente seguía en estado de coma, relajada y hasta podrías jurar que sonreía, haciendo que te contagiaras y sonrieras, era hermosa…y era tuya.

El menú elegido, eran ravioles con salsa, una que vos misma prepararías…y lo único que esperabas era que le gustara. Así que lo hiciste con todo el amor y paciencia del mundo, y cuando terminaste, escuchaste un grito que venia desde la habitación, y con la mas grande de las sonrisas hiciste acto de presencia.

-Mi amor…pense que me dejaste sola—dijo ella y te acercaste a la cama—

-hola mi bella durmiente…no, jamas, te quedaste dormida mientras mirábamos tele…y espero que se te haya pasado el sueño porque falta poquito para comer—dijiste vos, y te sentaste a su lado, ella dejo un beso en tus labios—

-¿estas cocinando?—pregunto ella y besaste su frente—

-obvio—dijiste y ella sonrio mientras comenzaba a refregar sus ojos—

-¿dormi mucho?—pregunto ella y miraste tu reloj de muñeca—

-Unas dos horitas—dijiste y ella se sorprendio—

-wow…ni cuenta me di—dijo ella y vos la abrazaste—

-te amo—dijiste y besaste su cuello—

-yo tambien—dijo ella, y de repente empezaste a sentir que te empujaba, te separaste para mirarla y segundos despues, la viste correr al baño. Frunciste el ceño y rápidamente te levantaste de la cama para ir con ella, quien cuando te vio, comenzo a hacerte señas con su mano para que te alejaras—¡No! no te acerques…por favor—pidio ella-

-¿Qué pasa Pau?—dijiste, un poco asustado, y te acercaste un poco mas—

-¡No Pepe!—dijo ella, y la viste acercarse al inodoro para vomitar, te acercaste para agarrar su cabello—Sali—dijo ella, un poco irritada—

-¿Qué pasa mi amor?—preguntaste, entre asustado y desesperado por no saber el motivo por el cual vomitaba y queria que te alejaras—

-¡me da nauseas tu perfume!—dijo, entre arcadas…y volvia a vomitar. Automáticamente te levantaste del suelo—

-¿mi perfume?...pero si es el mismo de siempre…y a vos te encanta—dijiste mientras te sacabas la camiseta y la olias…y la veias abrazarse al inodoro—

-ya se…pero me da asco—dijo ella, levantándose de a poquito y yendo hacia el lavabo para enjuagar su boca—

-¿queres que me bañe?—preguntaste—disculpame mi amor…no sabia—dijiste con un poco de culpa, ella levanto la vista y te miro mientras mordia su labio inferior—

-yo tampoco…me acabo de enterar—dijo ella sonriéndote—

-¿vas a poder comer?...te prepare el almuerzo con mucho amor—dijiste y ella te miro con ternura—

-Obvio que si…ahora tengo hambre—dijo ella haciéndote estallar en risas, hace segundos estaba vomitando—

-Loquita—dijiste tirándole un beso—voy al otro baño a ver si puedo sacarme el perfume de encima—dijiste, e hiciste exactamente eso-

Te diste una ducha relámpago, y luego de ponerte un pantalón del pijama, fuiste a la cocina, para ver la mesa preparada.

-Ei…terminaste—dijo ella, y te acercaste para darle un beso—

-¿Ahora no te doy asco? ¿ya se me fue el mal olor?—preguntaste haciéndola reir, ella te dio un beso—

-Si…parece que ya paso…¿podemos comer?—pregunto ella y reíste—

-si Pau…ya sirvo—dijiste volviendo a besarla—

Te encargaste de servir la comida…y te sentiste tan feliz, de verla disfrutando de su almuerzo, de ver que le habia gustado lo que con tanto amor habias hecho para ella.

-esta muy rico mi vida—dijo ella, comiendo el ultimo raviol del plato—

-Muchas gracias…lo hice para vos—dijiste guiñándole un ojo, ella sonrio y te tiro un beso. En ese momento, el celular de ella comenzo a sonar, y te sonrio al atender—

-¡Anita!—saludo ella alegre, y la miraste frunciendo el ceño—si…¿yo? ¿con Pedro?...nah, nada que ver—dijo ella riendo—no la estoy boludeando…¿verdad mi amor que no estas conmigo?—dijo ella, estallando en risas—si…esta conmigo—dijo ella mientras te tiraba un beso, vos negaste con la cabeza mientras sonreías, no la iba a dejar en paz—bueno…ahora le digo que la llame…si, no se preocupe—

Los segundos posteriores…estuviste pintado al oleo, Paula se habia quedado hablando horas con tu madre, obviamente sin contarle el noticion, pero hablando en fin…en el fondo…te encantaba la relacion que tenian…y si ahora la amaba, no querias imaginar cuando se enterara de que iba a hacerla abuela…Estabas entre nubes de algodón, todo era tan lindo…que tenias miedo de que tu burbuja se pinchara, de que todo fuera un sueño, pero…era real, ibas a ser papa…y Paula estaba ahí…con vos.

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Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Setenta y seis que espero les guste y  mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido. 

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Capitulo 76

Ella

Todavía te costaba caer en lo que acababa de pasar, y en como Pedro se había aparecido sorpresivamente en la consulta, en la primera de su hijo. Los dos estaban todavía muy emocionados y conmovidos por lo que habían vivido…era algo único y hermoso.

Ahora mismo, estaban subiéndose al auto, para emprender camino hacia la casa de él, se debían una charla, vos más que nada le debías explicaciones. Y por supuesto que se las ibas a dar…se lo merecia, y querias que te perdonara por haberlo lastimado de esa forma, aunque no hubiera sido tu intención, pero de todas formas lo habias hecho.

Una vez que llegaron, él te hizo pasar, y te sentaste en uno de los sillones, el mas grande. El a los pocos segundos, lo hizo a tu lado.

-¿Queres algo?—pregunto el, sonriéndote—

-Ca…—dijiste y rápidamente te diste cuenta de que ya no podias darte ese gustito de tomar café por nueve meses—té si tenes—dijiste sonriendo, el solto una pequeña risita—

-Si… tengo, el de durazno, el que te tomabas antes de dormir—dijo el, y le sonreíste, el ni siquiera tomaba te, pero lo compraba por vos, detalles como ese, te hacían amarlo—ya te traigo—dijo el y asentiste, volvió a los pocos minutos con una tasita de te en una bandeja, junto con las galletitas sonrisas que tanto te gustaban. Volviste a sonreírle—

-¿desde cuando comes sonrisas?—preguntaste mirándolo, el se encogio de hombros—

-es como que ya me habia acostumbrado a comprarlas, y bueno—dijo el, sentándose a tu lado—

-muchas gracias—dijiste, y te acomodaste un poco, para dejar la bandeja en la mesa ratona—

-¿podes?—pregunto el, y asentiste sonriendo—

-Si, no te preocupes—dijiste, y volviste a sentarte bien, para poder mirarlo y comenzar con tu relato—

-Bueno…creo que nos debemos una charla, ¿no?—dijo el, “rompiendo el hielo”—

-Una charla…y yo te debo una y mil disculpas—dijiste y el sonrio para luego acercar su mano a la tuya y tomarla. Respiraste profundo y lo miraste, esperabas encontrar las fuerzas necesarias para poder hablar—Creo que la forma en la que te dije la verdad no fue la mejor…tuve miedo, y no me animaba—dijiste y el te miro—

-Siempre tuvimos la suficiente confianza como para decirnos la verdad Pau…todavía me cuesta entender porque lo hiciste, pero supongo que tuviste tus motivos, y era el miedo—dijo el—

-Si…siempre tuvimos la confianza para decirnos las cosas, pero esto no era una “cosa” mas, era mas difícil—dijiste y miraste hacia abajo—

-Creo que me sorprendió el hecho, de que te dieras por vencida tan rápido con lo nuestro…nos habia costado tanto llegar a donde estábamos, que no me entraba en la cabeza que pudieras terminar con esto—dijo el, y se acerco un poco mas—

-¿estas enojado conmigo?—preguntaste, haciéndolo sonreir con ternura—

-Me enoje en su momento…pero ahora que te veo, y que se lo que esta pasando ahora…¿Cómo puedo mirarte y estar enojado, sabiendo que tenes a nuestro bebito adentro tuyo?—dijo haciéndote sonreir…escucharlo hablar en plural, era lo mas lindo del mundo—ademas…Virginia te lo pidió, ¿verdad?—pregunto y te quedaste mirándolo, la sonrisa se te habia borrado, pero, ¿Cómo se habia 
enterado?—

-No…no—dijiste—

-Pau…me lo dijo la misma persona, que me conto la noticia de que voy a ser papa—dijo el, y miraste hacia abajo—

-¿Quién de mis amigas fue?—preguntaste, ya dabas por hecho que fue alguna de ellas, eran las únicas que lo sabían—espera…no me digas nada…fue Paz—dijo ella, y cuando el te sonrio, pudiste confirmarlo—

-Si…fue ella, y mas te vale que no le digas nada…menos mal que me lo dijo, si me perdia la primer consulta de mi bebe no me lo iba a perdonar nunca—dijo el, vos sonreíste, y te sentiste culpable—

-Ibas a odiarme, ¿no?—preguntaste—

-No…jamas podría odiarte, sos la persona que mas amo, ¿cómo me vas a preguntar eso?—dijo el—

-Yo tambien te amo—dijiste y el sonrio—¿crees que vas a poder perdonarme?—preguntaste haciéndolo reir—

-ya te perdone loquita…¿crees que estarías aca de ser lo contrario?—pregunto el, y lo miraste embobada…era hermoso, era tuyo, y era el padre de tu bebe—

-Y bueno…pero, yo no quiero que dudes de mi amor…no lo supe manejar, y capaz quise tomar el camino mas fácil, en vez de enfrentar todo con vos—dijiste, y en ese momento, el se acerco, para rodearte con sus brazos, y dejar tu cabeza sobre su pecho…que bien se sentía—

-Ya paso…ahora  podemos hacerlo, ¿no?—pregunto el, y levantaste la cabeza para mirarlo—

-Si…obvio que si, ya no quiero estar mas lejos tuyo—dijiste—

-Pf…estas desquiciada si pensas que voy a alejarme con vos teniendo a mi bebe…estas loquita—dijo el haciéndote reir—

-Tampoco quiero que lo hagas…bueno, tampoco queremos, hay que empezar a incluirlo—dijiste, y el llevo una mano a tu panza chata—

-¿falta mucho para que empiece a crecer?—pregunto y reíste—

-¿No escuchaste a Carolina?, cuando entre en los tres meses recién vamos a notar cambios—dijiste—

-Aunque yo ya vi algunos eh…no se de que cambios hablas vos—dijo el, y lo miraste con el ceño fruncido—

-¿Qué cosa?—preguntaste—

-No se…vos deberias darte cuenta—dijo el y te miraste a vos mismas—

-Son…las dos cosas mas hermosas que vi en mi vida—dijo el, y cuando dijo “dos cosas”, rompiste en carcajadas…estaba hablando de tus pechos, el tambien comenzo a reir—Y anda comprando mamaderas, leche y esas cosas…olvídate de que vas a ser la fuente de alimento del bebe, esas dos son mias—dijo el y volviste a reir—

-¿no pensas compartir?—preguntaste—

-Pero ni loco—dijo el, y cuando volviste a mirarlo, el acorto la distancia entre sus rostros y finalmente te beso…¡como habias extrañado su boca!—como te extrañe—dijiste, y el beso tu frente—

-te amo—dijiste—y yo tambien te extrañe…muchísimo—dijiste abrazandolo—

-¿le vas a decir a Virginia?—pregunto el, y suspiraste—

-Si…y ya no quiero esperar mas…quiero decírselo a mi familia tambien—dijiste y el sonrio—

-Y yo a la mia…imagínate a mama, se va a volver loca—dijo el haciéndote reir—

-¡si!—dijiste abrazandolo mas fuerte—

-¿te quedas conmigo?—pregunto el—

-¿puedo?—preguntaste y el te beso—

-obvio—dijo el, y beso tu frente—

Entonces…eso queria decir que estaban juntos de nuevo….juntos para hacerle frente a lo que viniera, a Virginia, a tu familia….a quien fuera. No te separarias de el otra vez…ahora lo harian juntos.

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Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Setenta y seis que espero les guste y  mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido. 

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disculpen que suba tarde, pero ahora va a tener que ser asi...=(=(

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NUNCA LES PIDO NADA PERO VOTENME EN LA ENCUESTA DE LAS INSOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!! POR FAAAAAAASSSSSSSSSSSSSSS♥ 

(O MAÑANA NO SUBO) JAJAJAJJAJA NAH CHE...PUEDE QUE SUBA, PUEDE QUE NO...ASI QUE SI VOTAN SUBO...SI NO............se lo dejo a su criterio!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Capitulo 75

El

Despues de la visita de Paz, habías quedado…perdido, flotando, no sabrias como describir lo que sentias, porque no se podia…porque era único. ¡Ibas a ser papa!. Sonreiste ampliamente, ahora estabas comenzando a hacerte a la idea…o bueno, ni siquiera eso, no podias terminar de asimilarlo…habias pasado por todos los estados y emociones posibles.

Ni siquiera habias podido dormir, esperando a que fuera finalmente viernes, para poder ir a la clínica y asistir a la primer consulta, de tu bebe…con ella. Suspiraste…sabias que ella no seria capaz de ocultarte una cosa asi, quizás no estaba preparada para hacerle frente a la situacion, no la juzgarías…aunque si seguias dolido por la situacion que estabas viviendo a causa de la decision de ella. Te quedaste despierto mirando los minutos pasar, y viendo las agujas del reloj que tenias en la habitación, si eso no era estar ansioso, ¿Qué era?...

La mañana habia llegado muy lentamente, no querias ir a trabajar, asi que decidiste tomarte el dia…y si, tu hijo lo merecia. Tu hijo merecia que su papa tuviera un dia libre para el…sonreíste, TU hijo, un hijo que Paula y vos habían hecho con mucho amor…habia sido fruto de una de las miles de noches de amor. A pesar de todo lo que estaba pasando, la amabas…y mas ahora, que te habia dado una razon mas para que lo hicieras. Un bebito, de los dos. Alguien que te llamaría “Papa”, alguien a quien le compartirías un poco de ese amor, que hasta ahora solamente se lo habias destinado a Paula. Una partecita mas de Pau para amar, solo que tambien era una partecita tuya.

La consulta era a las 10:00 am, y a las 9:00 am, ya estabas arriba del auto…pero como siempre, ¡algo tenia que pasar!, el trafico era terrible, y no podias creer que esto tuviera que pasar hou, ¡justamente hoy!, el dia mas importante de tu vida, y no podias permitirte llegar tarde…te odiarías toda la vida. 

Te cansaste de tocar bocina, y mientras rezabas, el trafico comenzaba a avanzar de a poco…Para tu suerte, llegaste apretado con el tiempo, pero si corrias un poco, llegarías a tiempo.

La recepcionista te indico para donde tenias que ir, y rápidamente entraste en el consultorio numero 

7, el de la Doctora Carolina Ibarra, ni siquiera tocaste la puerta…y la mirada de Paula y de la doctora se clavaron en vos. Ni siquiera miraste a tu alrededor…lo único que fuiste capaz de ver, fueron esos ojos verdes, que brillaban con emoción…Cuando la doctora te pidió que te acercaras, no dudaste ni un segundo y te sentaste al lado de Paula, al mismo tiempo que tomabas su mano… capaz ese gesto estaba demás teniendo en cuenta por lo que estaban pasando, pero sentias que era necesario…necesitabas que ella te sintiera cerca, que estabas a su lado a pesar de todo. Ella te miro y le sonreíste, ella te regalo una pequeña sonrisa tambien.

-¿Estan listos?—les pregunto, los dos se miraron automáticamente para luego asentir—

-si—dijiste, emocionado—

-si—dijo ella, con la voz cargada de emoción—

-Miren—dijo moviendo el aparatito sobre la panza de Pau, los dos miraban atentamente el monitor 

frente a ustedes, y al no entender nada, Carolina comenzo a reir—ya les voy a explicar…asi que, escuchen—dijo ella—todo esto es el liquido amniótico, y este puntito que ven aca…es su bebe—dijo ella, y aunque te costaba entender todo, pudiste ver el puntito, ese puntito que era una vida, y era tu hijo…o hija. Miraste a Paula, y la viste derramar unas lagrimas. Apretaste y besaste su mano—¿quieren escuchar su corazon?—pregunto, y los dos asintieron eufóricamente, ¿Qué pregunta era esa?, segundos despues, escucharon un sonido extraño, un tamborileo acelerado. Paula te miro asustada—¿Qué pasa? ¿Por qué esas caras?—pregunto—

-¿ese es el corazon?—preguntaste, y Carolina asintió—

-¿Por qué tan rápido?—pregunto Paula, haciéndola reir—

-es normal…tranquila—dijo y vos besaste su mano una vez mas—

Siguieron escuchando el corazoncito de su bebe por unos cuantos minutos mas. La burbujita en la que estaban metidos, exploto cuando Carolina dijo que Paula podia limpiarse. Ambos estaban super movilizados por lo que acaban de vivir, que dicho sea de paso, era algo único y hermoso.

Carolina los dejo solos para que pudieran recomponerse despues de tan emotivo momento…y ahí 

llego el momento en el que tuvieron que romper el silencio.

-Yo—dijo ella, intentando mirarte, pero sus ojos se llenaron de lagrimas rápidamente—yo no te lo iba a ocultar…te lo iba a decir, pero no sabia como, no me animaba…tenia miedo—dijo ella, vos la tomaste por las mejillas y pegaste su frente con la tuya—

-Sh…ya sabia que no ibas a ocultarme esto—dijiste—

-tenia miedo de que no quisieras verme—dijo ella, dejando escapar algunas lagrimas, las que te encargaste de secar con tus pulgares—

-no importa…ya esta, ya lo se…y estoy muy feliz—dijiste con una sonrisa, contagiándola a ella tambien— la noticia mas linda de mi vida—dijiste y ella te abrazo—

-Perdoname…perdóname por lastimarte de esa forma, pero la situacion me supero, elegi el camino mas fácil, pero sin duda el mas doloroso—dijiste y te separaste para mirarla—no quiero volver a enfrentarme a Virginia—dijo ella y besaste su mejilla—

-No hablemos de eso…ya vamos a tener tiempo, no es el lugar, ¿no te parece?, acabamos de ver a nuestro hijo y no da—dijiste arrugando tu nariz—

-es verdad—dijo ella sonriendo, y besaste su mejilla—

Tu corazon latia desbocado, y necesitabas mostrarte normal por fuera, aunque por dentro todo 

estuviera totalmente revolucionado.

-no lo puedo creer todavía—dijo ella, y besaste tu frente—

-Yo tampoco…lo pienso y me cuesta creerlo, pero es asi…vamos a ser papas—dijiste abrazándola—

En ese momento, Carolina entro al consultorio, rompiendo el momento, ya iban a tener tiempo. Ya intentarían buscar soluciones, , pero ahora…la atención era únicamente para su hijo. Carolina les dio detalles de lo que prontamente iban a vivir, y nuevamente sus corazones latian acelerados…tu vida iba a cambiar completamente, para vivir lo mas hermoso del mundo.

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Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Setenta y cinco que espero les guste y  mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido. 

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ES POSTA ehhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Capitulo 74

Ella

Volviste a tu casa despues de haberte dado una vueltita por la farmacia,  las fechas no cerraban y tus dudas no hacían mas que ir en aumento. Tus ojos se llenaron de lágrimas apenas ver las cajas de los Eva test, ahora ya no estabas tan segura de querer sacarte las dudas ni de saber la respuesta…¿Qué pasaba si daba positivo?, ¿Qué se suponía que debias hacer?, estabas separado de Pedro…y por un momento, la imagen de el sosteniendo a un bebe coparon tu cabeza, sonreíste con tristeza…Vos lo habias alejado…el ya no queria estar con vos, ya no queria que lo lastimaras y estaba perfecto.

Entraste al baño dando respiraciones profundas mientras abrias las cajas y leias las instrucciones…era muy fácil, pero a la vez te daba miedo. Seguiste los pasos, y minutos después, llego el momento de ver el resultado, cerraste los ojos con fuerza antes de abrirlos y  que tu corazón dejara de latir al ver las dos rayitas que significaban “Positivo”…Ibas a ser mama, las lagrimas comenzaron a caer por tus mejillas, cual catarata, tenias una mezcla de emociones, algo que nunca habias sentido, algo que no se comparaba con nada….Tenias una vida dentro tuyo, una vida que pedro y vos habían creado… La pregunta ahora era…¿Cómo seguias adelante?, ¿Cómo seguir cuando habias aceptado estar lejos del amor de tu vida por respeto a tu hermana y ahora estar embarazada de el?...suspiraste, ¿Algo mas podría pasarte?...no creías que fuera posible. Llevaste tus manos a tu vientre y lo acariciaste,  soltaste una sonrisita…y ¡tenias un bebito adentro!

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Una semana paso desde la semejante noticia, y los días que vinieron luego, fueron de los mas raros, ¿Por qué?, porque todavía tenias que acostumbrarte a la idea de que tenias una vida adentro tuyo, un hijo tuyo y de Pedro. Tus amigas vinieron a visitarte el miércoles, y no pudiste seguir callándote la verdad…necesitabas consejos…No sabias que hacer con Virginia, obviamente iba a enterarse en algún momento, pero ya habias aprendido la lección, y tenias que hacerlo antes de que ella se enterara por su lado y volvieran a pelearse por el mismo motivo, “Omisión”  de la verdad…Ellas te dijeron que lo mejor era que se lo dijeras cuanto antes, y por supuesto que el papa del bebe tambien, todas se pusieron muy felices y contentas con la noticia, ibas a ser la primer madre del grupo, y todas serian unas tias babosas, ya te lo habían recontra asegurado…

El viernes seria tu primer consulta con el medico, tus amigas se habían encargado de remover contactos, y ya te habían sacado turno con una amiga de una de ellas. Tenias dos días para hacerte la idea de eso tambien, porque seria parte de una rutina, tendrías que visitar al medico muy seguido. 

Buscaste información sobre que se hacia en la primer consulta, y ya sabias mas o menos con lo que te ibas a encontrar…pero te faltaba algo, y era su papa…te faltaba tu otra mitad, Pedro.

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El viernes llego mas rápido de lo que esperabas, mucho para tu gusto…pero ahí estabas, arreglándote, nerviosa y con las manos temblándote a mas no poder. Intentarias canalizar esos nervios, era algo hermoso, y tu bebe merecia que fueras feliz por tenerlo ahí dentro.

Un rato despues, ya lista, tomaste valor y entraste a tu auto para emprender camino hacia la clínica. 

Una vez que llegaste, mas nerviosa que antes, te dirigiste hacia el área de recepción, donde te dijeron que la doctora ya te estaba esperando, asi que te indicaron donde quedaba el consultorio y cuando llegaste tocaste la puerta tres veces, la misma se abrio segundos despues, una mujer de unos treinta años, te sonreía amigablemente.

-hola, Paula, ¿no?—dijo ella y asentiste—

-Hola doctora—dijiste, y te hizo pasar y tomar asiento—

-Bueno, mi nombre es Carolina…Pilar me conto un poco de que se trataba todo esto, asi que, se que 

es tu primer consulta—dijo ella y asentiste con una sonrisa—No estes nerviosa…es un motivo de 

felicidad—dijo ella, y le sonreíste…si, lo era, pero te faltaba el padre—

-Si…obvio que es un motivo de felicidad—dijiste—

-Bueno…te voy a contar mas o menos que vamos a hacer—dijo ella y asentiste—lo primero de todo, voy a tener que pesarte, asi  vemos cual es tu peso inicial, y cuanto es lo máximo que podes aumentar hasta la próxima consulta o próximo mes, ¿si? ¿me vas siguiendo?—pregunto y asentiste—vamos a ver tambien, de cuanto exactamente estas…vamos a ver cual es el tamaño del bebe, y la fecha estimada de su llegada al mundo—dijo con una sonrisa, contagiándote a vos…ahora los nervios se habían ido, pero la ansiedad se  habia disparado completamente—

-¿Voy a poder verlo?—preguntaste, y ella te sonrio mientras anotaba algo—

-Y…de poder ver, si, obvio…pero no estaras de mas de dos meses o quizás menos, por lo que solo vamos a ver un puntito…lo que se puede hacer, es escuchar su corazoncito—dijo ella y tus ojos brillaron con emoción, estabas segura…todo tu cuerpo vibro con un hormigueo, pero el bueno…¡super bueno!—

La doctora hizo que dejaras todas tus pertenencias sobre el escritorio, para poder pesarte. No recordabas la ultima vez que te habias pesado, pero de tu peso normal de siempre, habias aumentado un kilo, sonreíste…tu bebito ya estaba comenzado a hacer cambios en tu vida, y en tu cuerpo tambien.

-Bien Pau…estas de un mes y cuatro semanas, a punto de entrar en los dos meses. Todo esta muy bien, asi que lo mejor es que vayas comiendo sano, cumpliéndote los antojos, pero con moderación…un kilo por mes esta bien—dijo ella y asentiste—ahora vamos a pasar a la ecografía—dijo ella señalándote la camilla—acostate ahí…te voy a pasar el gel, y despues este transductor—dijo ella y miraste todo atentamente. La viste prender el monitor, y luego pasarte el gel, que dicho sea, ¡estaba helado!—¿Su papa no va a venir?—pregunto ella y la miraste…y cuando estabas a punto de decir que no…la puerta del consultorio se abrio—

-Permiso—escuchaste…y no podias equivocarte…era su voz, y cuando giraste la cabeza, lo confirmaste. Era Pedro—

-¿Sos el papa del bebe?—pregunto ella, y lo viste asentir, el te miraba,y vos tambien…vos por tu parte te quedaste muda…¿Cómo lo supo?—

-Si…soy el papa—dijo el, con una sonrisa—

-veni….acercate, llegaste justo para verlo—dijo Carolina, y el se acerco…se sento a tu lado y tomo tu mano—

Tu corazon latia con fuerza, y eras una ola de sentimientos…Tus ojos estaban húmedos, y Pedro apretó tu mano.

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Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Setenta y cuatro que espero les guste y  mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido. 

 me gustaría saber si les gusta y leerlas.

Si hay MUCHOS, MUCHOS, MUCHOS comentarios, mañana tienen otro...pero solo si hay MUCHOS, y (con muchos  me refiero a mas de 10). Y CON NOMBRE DE  TWITTER.  

mañana subo nuevamente y con 10 comentarios o mas ehhh.

ES POSTA ehhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!