El
Tu cuerpo estaba en la oficina, sentado frente a la
computadora y tus ojos puestos sobre la pantalla, pero tu mente, tu corazón y
tus pensamientos, estaban con Pau y en su voz cuando un rato atrás hablaste con
ella por teléfono. Sabias perfectamente cómo se sentía, no hacía falta ser un
genio para saber que todo esto le dolía.
Solo esperabas que estuviera bien en tu ausencia…así que te apuraste a terminar con tu trabajo, para salir disparado a tu casa y preparar un bolsito con tu ropa, por ningún motivo te separarías de Paula, y menos ahora, sabiendo que su ánimo no era el mejor y estaba propensa a decaer todo el tiempo. Una vez con tus cosas lista, nuevamente saliste corriendo hacia la casa de Paula, no podías esperar a tenerla entre tus brazos, y decirle que todo estaría bien…quizás un chocolate lograría sacarle una sonrisa, pensaste al pasar por un kiosco, y ahí lo hiciste, compraste el más grande de todos. Cuando te diste la vuelta para seguir caminando, tu cuerpo se chocó con alguien mas, y al pedir disculpas, te diste cuenta de que la persona que estaba frente a vos era Virginia. La miraste y ella tambien lo hizo.
-Hola Virgi—dijiste—
-Hola—dijo ella, y vos no pudiste sostenerle la mirada, cuando volviste a levantar la vista, ella miraba tu bolso y el chocolate que llevabas en la mano—¿es para ella, no?—pregunto, y vos suspiraste—
-Virgi…no es momento para esto, ¿no te parece? –preguntaste—si, es para tu hermana…creo que te mereces una explicación, y me gustaría dártela—dijiste y ella miro hacia otro lado—
-¿Qué me vas a decir Pedro?...¿que es lo que tiene ella que no tenga yo?—dijo, y tus ojos se abrieron con sorpresa—
-No es lo que tenga…obviamente si, pero mi corazón eligió por mi, me enamore de Paula, Virgi—dijiste—la conocí antes de conocerte, y nos volvimos a encontrar un tiempito después, que fue cuando nos conocimos vos y yo—dijiste y ella te interrumpio—
-Pero ella estaba con Francisco—dijo ella—
-si, ya se, nos seguimos viendo…y cuando decidimos los dos, que íbamos a terminar con nuestras relaciones, vos habias armado el almuerzo con Paula, donde nos enteramos de que eras vos—dijiste—
-¿y despues? ¿estaba bueno seguir burlándose de mi?—pregunto y negaste—
-No quisimos lastimarte… ella y yo nos alejamos unas semanas, las mismas que nos sirvieron para darnos cuenta de lo que sentíamos—dijiste y la viste dejar escapar algunas lagrimas, tu corazon se apreto—nos enamoramos…y aca estamos—dijiste, y recordaste la llamada de esta mañana—ella esta muy mal, ¿sabes?—dijiste—
-No me importa…asi como a ella tampoco le importo lo que yo pudiera llegar a sentir…y basta, no necesito nada mas—dijo ella, dándose media vuelta y caminando en la dirección contraria a la tuya—
Vos seguiste tu camino…era medio inútil seguirla, sabiendo
que seguiría pensando lo que ella quisiera. Una vez que llegaste a la casa de
Paula, simplemente entraste, ella te había dado sus llaves…lo que no te
esperabas, era encontrártela, sentadita contra la pared, llorando con su cara
escondida en sus rodillas, tu corazón se apretó con fuerza y dejaste caer tus
cosas al suelo para sentarte junto a ella y llevártela a tu regazo para
rodearla con tus brazos.
-Me odia…no me va a perdonar nunca—decia entre pausas e
hipeos—no me quiere escuchar…estoy muerta para ella—dijo y dejo escapar un
sollozo que partio tu corazon—
-Sh…tranquila mi amor, todo se va a solucionar, vas a ver, yo voy a estar con vos, no te voy a dejar sola—dijiste mientras besabas su cabeza, porque era la única parte de su cuerpo que alcanzabas con tu boca, su cara estaba escondida en tu cuello—
-me quiero morir—dijo ella, con su voz cargada de angustia—
-sh, no digas eso….ya va a pasar, todo es cuestión de
tiempo—dijiste, mientras la escuchabas sollozar, acariciabas su espalda
incansablemente, hasta que empezaste a notar que se calmaba—
-te estoy manchando toda la camisa—dijo ella con voz gangosa—
-mira por lo que te preocupas…no me importa—dijiste, y ella
se separo un poquito para poder verte. Sus ojitos estaban rojos y su nariz
tambien, besaste su boca—no quiero que llores mas—dijiste y ella te miro—
-fui a verla…fui a su casa—dijo ella, y tomaste su mano, para mirarla—
-¿Cómo que fuiste Pau?—dijiste y ella asintió—
-No me abrio la puerta…pero me dijo de todo, me dijo que
estaba muerta para ella, que esperaba esto de cualquier persona menos de
mi—dijo mientras las lagrimas volvían a escapar de sus ojos—ni siquiera me dejo
explicarle, yo no lo hice a propósito Pepe…solamente me enamore, nunca la quise
lastimar, te lo juro—dijo ella, explicándote…como si vos no lo supieras. Sabias
perfectamente cuales eran sus sentimientos—
-sh…no hace falta que me digas eso a mi, yo se lo que
paso—dijiste y ella volvió a abrazarte—
Ella se quedó entre tus brazos, intentando calmarse, o más
bien vos intentando calmarla, casi media hora después lo habías logrado, había
dejado de llorar, pero seguía con su cara escondida en tu cuello su mano libre
jugaba con los vellos de tu pecho que dejaba ver tu camisa con los primeros
botones desprendidos.
-¿tenes hambre mi vida?—preguntaste, y la escuchaste sorber
su nariz—
-No Pepe…no me pasa la comida—dijo ella y acercaste tu
cabeza para poder besar su cuello—
-te traje un regalito—dijiste y ella movio su cabeza para
mirarte—
-¿Qué cosa?—pregunto—
-Yo te lo doy, pero si me prometes que vas a dejar de llorar—dijiste
vos y ella volvió a esconder su cara en tu cuello—
-es que no puedo…yo tambien quiero dejar de llorar, pero me
duele lo que esta pasando—dijo ella, y besaste sus labios—
-esta bien…te lo voy a dar igual, pero solo porque te
amo—dijiste y ella levanto su cabeza para sonreírte chiquito—y tambien te vas a
tener que parar—dijiste y ella se quejo, pero finalmente se puso de pie, vos la
tomaste de la mano y caminaste hasta donde habían quedado tus cosas, abriste el
bolsillo delantero de tu bolso, y de allí sacaste el enorme chocolate que
habias comprado para ella, sus ojitos se iluminaron y segundos despues
obtuviste una sonrisa, tu corazon dio un saltito—que linda sonrisa…mira, el
chocolate logra en dos segundos, lo que estoy intentando lograr hace mas de dos
días—dijo el y ella sonrio—
-hey…nada que ver—dijo ella y vos besaste sus labios—
-te amo—dijiste—
-te amo Pepe—dijo ella y volvió a besarte—
Matarias por una sonrisa de ella…y darias tu propia vida por
transformar esas lagrimas en felicidad. Y lo lograrías, estabas seguro. Ese era
tu objetivo.
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Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Cincuenta y nueve. que espero les guste y mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido.
me gustaría saber si les gusta y leerlas.
Si hay MUCHOS, MUCHOS, MUCHOS comentarios, mañana tienen otro...pero solo si hay MUCHOS, y (con muchos me refiero a mas de 10). Y CON NOMBRE DE TWITTER.
mañana subo nuevamente y con 10 comentarios o mas ehhh
Qué tierno que es Pepe con Pau, espero que todo se solucione pronto.
ResponderEliminarme mata de amor Pepe @pepeypaulove
ResponderEliminarMe encanta tu novela, y ese amor tan lindo que se tienen, espero que todo pase con virgi.
ResponderEliminarEspero el proximooo.
@BelnConti
Muy lindos Pyp
ResponderEliminarawww que lindo cap a pesar de toda la situacion rociibell23
ResponderEliminarOohh que lindo capítulo!! Con lo que los extraño!!
ResponderEliminarMe encanta!!
ResponderEliminarexcelente como siempre
ResponderEliminar@pedropaulaoli4
Me encanta la nove!! Es muy linda! Muy tierno el cap! Ojala virgi los escuchara..
ResponderEliminarAwww más lindos, es recomendable tierno pepe! Espero los próx caps, bsoos @GraciasxTodoPYP
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarayyyy lo amo a Pedro
ResponderEliminarme super encanto espero el siguiente @iara_tefiPyP
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